sábado, 13 de octubre de 2012

La Insurrección Zapatista en Chiapas

 José Rosario Araujo

EL EZLN era un secreto a voces entre los habitantes de la zona de Chiapas, los indígenas ya estaban hartos de las represalias y el abuso que vivían asolados por los cuerpos militares y paramilitares del gobierno Mexicano.
Ya a las 11 de la mañana de ese 1 de enero Televisa pasaba la llamada de un periodista llamado Juan Sebastián Solís quien informaba la presencia de hombres con pasamontañas, armados que representaban a el Ejercito Zapatista de Liberación, anunciaba la declaración de guerra de estos subversivos. Ya aeronaves del ejército mexicano recorrían los cielos de esos poblados

Las autoridades se negaban a creer que miles de indígenas quizás mal armados estaba preparando una rebelión que sorprendería al mundo. El ejército guerrillero se apodera de cinco camiones en San Miguel Pataté, poblado de 5 000 habitantes localizado entre Altamirano y Ocosingo para trasladar sus tropas.
El Comandante de la VII Región Militar sobrevuela la zona al ser informado de la presencia de grupos armados en San Miguel. Los indígenas echaban a perder a México la entrada a la Globalización que traía hambre y desolación en las capas humildes de la sociedad mexicana.
Después de la visita del militar en las poblaciones de Ocosingo, Altamirano y Las Margaritas son apostados hombres de la seguridad pública para enfrentar cualquier ataque de los insurgentes.

El EZLN trasmite por emisoras de radios informaciones sobre el levantamiento que se están llevando a cabo, se difunde un video por un canal de televisión en donde aparece un hombre con pasamontañas que anuncia las causas que los llevaron a realizar ese levantamiento armado, más adelante se presenta otro enmascarado que con el tiempo seria conocido como el Sub- Comandante Marcos que pide a los poderes públicos que desconozcan al Poder Ejecutivo.

Se producen enfrentamientos con los cuerpos policiales ocasionando una gran cantidad de muertos, las autoridades militares y policiales no pensaron que el EZLN tenía la capacidad para tomar las cuatro cabeceras municipales. Hay versiones que dicen que el gobierno desde el día 30 de diciembre tenía el conocimiento de la presencia de hombres armados y eso hizo que aumentaran la cantidad de efectivos en la zona pero no pensaron que el movimiento era tan grande y eso fue lo que los tomo por sorpresa.
Los indígenas sembraron una frase en esta acción que era: ‘Nosotros nos levantamos en armas porque estamos muertos, estamos muertos de enfermedades curables, de gripe, de dolor de panza, de dolor de estómago y de otras cosas’ y entonces Marcos le daba un giro ‘Nosotros estamos muertos, porque con nuestra muerte vuelven a vivir nuestros muertos’."

El Ejército Mexicano en la tarde del 1 de enero se encontraba sin responder y empezó a reunir tropas desde el exterior con el fin poder atacar.
A Ocosingo son enviados tres batallones ya las fuerzas gubernamentales se preparan para desalojar a los zapatistas de las posiciones que habían tomado. Debían actuar con rapidez ya que lo que se estaba viendo ante la opinión pública internacional era que se estaba realizando un gran alzamiento indígena en la zona y no un pequeño brote armado como el gobierno mexicano trato de explicar.

Los zapatistas lograron su primera fase en la campaña y empezaron a retirarse a las montañas, abandonaron San Cristóbal atacando un penal y liberando a 179 prisioneros, atacaron el XXXI Zona Militar en Rancho Nuevo y abren una nueva fase en la campaña. Se suceden las dos batallas más importantes que son las de Rancho Nuevo y de Ocosingo. La primera se suscito a las siete de la mañana por tres lugares distintos, enfrentamiento que duro 8 días. Produciéndose numerosas bajas entre los ejércitos enfrentados.
El ejército mexicano reconoció la baja de 5 soldados y 6 heridos en La Sedena y la muerte de 24 efectivos de la fuerza insurgente, de una fuerza que venía de Tlaxcala reportaron 14 muertos y de 30 militares en el Corralito, además de la muerte de un Teniente Coronel que era el segundo Comandante del 24 Regimiento de Caballería de Comitán.

La batalla de Ocosingo fue la más sangrienta, el EZLN tuvo que enfrentarse al ejército mexicano dentro de la ciudad y los civiles se encontraron en el fuego cruzado. Una parte del grupo subversivo se desplazo de la ciudad dejando 800 combatientes que se enfrentaron a los batallones 17, 53, y 73 que venían de Villahermosa que eran un promedio de 1800 hombres que se les unió el día 3 un convoy de 25 vehículos con soldados del 57 batallón de infantería de Cárdenas y Tabasco que eran 2400 soldados. Rodearon la ciudad y penetro el 73 batallón de infantería, los rebeldes se situaron en el mercado y en el pueblo, con numerosos francotiradores dificultaban el avance del ejército.

El gobierno toma el mercado pero los zapatista había retirado parte de sus fuerzas, los restantes concentraron el fuego en las posiciones que mantenían las fuerzas gubernamentales para así poder desplazarse hacia una colina que servía de paso para la sierra pero al día siguiente el ejercito los ataca con fuego de morteros mientras las fuerzas del EZLN huyen hacia la selva

Para el día 4 de enero los medios de comunicación reportan un promedio de 10000 a 17000 efectivos del ejército mexicano con cien vehículos de guerra, helicópteros y aviones. El gobierno es atacado en Rancho Nuevo, lanza una ofensiva en Ocosingo y ocupa tres cabeceras municipales sin pelear ya que las fuerzas zapatistas las han abandonado.

En los cerros al sur de San Cristóbal se producen encuentros y esta es una zona que se encuentra muy poblada por indígenas, la resistencia es fuerte y el ejercito recurre a los bombardeos. Utilizan helicópteros artillados que ametrallan la zona y aviones que disparan cohetes y ráfagas de ametralladoras.
Los bombardeos siguen en el cerro Tzontehuitz, municipio de San Juan Chamula; Guadalupe Tepeyac, municipio de Las Margaritas, en donde el ataque duró alrededor de una hora, en San Felipe a cinco kilómetros de San Cristóbal fueron derribados tres aviones y dos helicópteros por el fuego insurgente en las inmediaciones de ejidos en la Selva Lacandona.

Los ataques aéreos producen repudio y un grupo de destacados intelectuales piden que cesen los bombardeos y el estricto respeto a los derechos humanos. La Fuerza Aérea lanza un comunicado en donde afirma su compromiso de respetar los derechos humanos pero al mismo tiempo Antonio Lozano Procurador General de la Republica opina que el ejército debe utilizar todos los medios para reintegrar el imperio de la ley de la paz. ¿Cuál ley y cual paz? Sería la pregunta de los indígenas que por falta de una paz justa y una ley para todos no tuvieron otro camino que convertirse en una fuerza armada para defender sus derechos.

El ejército mexicano toma la región, impide el libre tránsito y de manera ilegal asume funciones de policía y detiene a más de 100 personas y cometen grandes violaciones de derechos humanos, esto junto a los bombardeos produce un gran desprestigio nacional e internacional del gobierno y el ejército mexicano. El Presidente Carlos Salinas decreto el cese del fuego el 12 de enero y dijo que el ejército solo responderá si es atacado, pero este anuncio que impedirá la movilización de los insurgentes. Horas después de la alocución presidencial tropas federales apoyadas por helicópteros y aviones atacaron a una unidad del EZLN en un municipio de Ocosingo.
Los zapatistas tenían prisionero al gobernador de Guadalupe Tepeyac Absalon Castellanos Domínguez y la orden de cese de fuego dictada por el presidente les cayo de sorpresa y ordenaron un cese del fuego ofensivo pero mantuvieron sus posiciones. Después de 12 días los guerrilleros están cercados por el ejército mexicano y mantienen sus posiciones que eran un vasto territorio, de ahora en adelante el enfrentamiento se daría en otros medios y en otras condiciones pero lo que si demostraría el gobierno mexicano sería su ceguera e incomprensión al conflicto que se suscito con la confrontación de enero del año 94.
La lucha entre el gobierno mexicano y el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional se daría como ya dije en otro contexto y no sería menos interesante que este levantamiento en Chiapas pero eso sería otra histori

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